4 consejos para mantener una fe activa

  1. Oración: La oración es la respiración del alma que se conecta con su creador. Es hablar con Dios como nuestro mejor amigo. Orar es la llave que abre la puerta que nos conduce a Dios. La oración es vital para los creyentes y para poder desarrollar nuestra fe porque al orar estamos ejerciendo la fe.

Orar es el acto de abrir nuestro corazón a Dios como a un amigo. No es que se necesite esto para que Dios sepa lo que somos, sino a fin de capacitarnos para recibirle. La oración no baja a Dios hacia nosotros, antes bien nos eleva a Él. Elena de White

¿Qué dice la biblia sobre la oración?

Dedíquense a la oración: perseveren en ella con agradecimiento. Colosenses 4:2

No se inquieten por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, cuidará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús. Filipenses 4:6-7

Estén siempre alegres, oren sin cesar, den gracias a Dios en toda situación, porque esta es su voluntad para ustedes en Cristo Jesús. 1 tesalonicenses 5:16-18

Por eso les digo: Crean que ya han recibido todo lo que estén pidiendo en oración, y lo obtendrán. Marcos 11:24

Por eso, confiésense sus pecados unos a otros, y luego oren unos por otros. Hagan eso para que Dios los sane. La oración de quien está bien con Dios es poderosa y efectiva. Santiago 5:16

La oración es una acción que estimula a la fe, esta relacionada con la necesidad de acercarnos a Dios, contarles nuestros problemas, confesar nuestros pecados y faltas, agradecer por todos lo beneficios y bondades, como también interceder por otras personas que amamos y deseamos que estén bien.

2. Adoración: La adoración es nuestra necesidad de reconocer a nuestro Dios como nuestro Dios Creador y el Todopoderoso, el cual se manifiesta a través de la obediencia y cumplimiento de su palabra, sus mandamientos. Es la devoción que le rendimos a nuestro Dios reconociendo su Santidad, Poder y Amor por todos nosotros. 

El deber de adorar a Dios estriba en el hecho de que él es el Creador, y que a él todos los demás seres deben su existencia. Y cada vez que la Biblia presenta el derecho de Jehová a nuestra reverencia y adoración con preferencia a los dioses de los paganos, menciona las pruebas de su poder creador. Elena de White

¿Qué dice la biblia sobre a quién debemos adorar?

La biblia nos enseña que solo debemos adorar es a nuestro Dios Creador y a su hijo Jesucristo.

¡Que todo lo que respira alabe al Señor! ¡Aleluya! ¡Alabado sea el Señor! Salmo 150:6

Dios es espíritu, y quienes lo adoran deben hacerlo en espíritu y en verdad. Juan 4:24

Tuyos son, Señor, la grandeza y el poder, la gloria, la victoria y la majestad. Tuyo es todo cuanto hay en el cielo y en la tierra. Tuyo también es el reino, y tú estás por encima de todo. 1 crónicas 29:11

Porque todas las cosas proceden de él, y existen por él y para él. ¡A él sea la gloria por siempre! Amén. Romanos 11:36

Vengan, postrémonos reverentes, doblemos la rodilla ante el Señor nuestro Hacedor. Salmo 95:6

La adoración es un acto de fe hacia Dios reconociendo que es nuestro Dios Creador, reconociendo sus atributos, su poderío, su magnificencia, al igual que su amor, su misericordia, su bondad, su carácter. Como seres creados e hijos de Dios por medio de la fe en Jesucristo, le debemos adorar con humildad, devoción y agradecimiento profundo.

3. Leer la biblia: La biblia es para todos los verdaderos creyentes la palabra de Dios, la cual nos ha sido dada como una luz que puede alumbrar nuestro camino espiritual, nos puede dar sabiduría, nos enseña el carácter de Dios y su plan de salvación a través de Jesucristo, nos enseña la historia de la humanidad desde el principio hasta el fin.  

La Palabra de Dios debe ser el fundamento de todo estudio, y las palabras de la revelación, cuidadosamente estudiadas, apelan tanto al intelecto como al corazón y los fortalecen. Se requiere el cultivo del intelecto para que comprendamos la revelación de la voluntad de Dios para nosotros. Elena de White

¿Qué dice la biblia sobre el beneficio de su lectura?

Ciertamente, la palabra de Dios es viva y poderosa, y más cortante que cualquier espada de dos filos. Penetra hasta lo más profundo del alma y del espíritu, hasta la médula de los huesos, y juzga los pensamientos y las intenciones del corazón. Hebreos 4:12

Toda la Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender, para corregir y para instruir en la justicia, a fin de que el siervo de Dios esté enteramente capacitado para toda buena obra. 2 Timoteo 3:16-17

Tu palabra es una lámpara a mis pies; es una luz en mi sendero. Salmo 119:105

La exposición de tus palabras nos da luz, y da entendimiento al sencillo. Salmo 119:130

No se contenten solo con escuchar la palabra, pues así se engañan ustedes mismos. Llévenla a la práctica. Santiago 1:22

El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras jamás pasarán. Mateo 24:35

La palabra de Dios es poderosa, es viva y eficaz, puede transformar las mentes y corazones de los seres humanos pecadores e imperfectos, puede ayudarnos a vivir sabiamente, nos alumbra el camino a seguir, nos instruye y ayuda a conocer a través de ella al único Dios verdadero y a su hijo Jesucristo.

4. Testificar: Los hijos de Dios tenemos una historia que contar, esa historia es única basada en nuestras propias vidas y experiencias con nuestro Creador y con su hijo Jesucristo. Cada creyente que ha visto, oído y experimentado el Poder de Dios en sus vidas, es un testigo más de su poder y su amor.

Cada individuo que recibe a Jesús como su Salvador personal, ciertamente recibe también el Espíritu Santo a fin de ser su consejero, su Santificador, su Guía y su Testigo. Elena de White.

¿Qué dice la biblia acerca del testimonio?

Vayan por todo el mundo y prediquen el evangelio a toda criatura. Marcos 16:15

Serán Mis testigos en Jerusalén, en toda Judea y Samaria, y hasta los confines de la tierra. Hechos 1:8

Es necesario que el evangelio sea predicado a todas las naciones. Marcos 13:10

Lo que sabemos hablamos, y lo que hemos visto, testificamos. Juan 3:11

No podemos dejar de decir lo que hemos visto y oído. Hechos 4:20

Todo aquel que me confiese delante de los hombres, también el Hijo del Hombre lo confesará delante de los ángeles de Dios; pero el que me niegue delante de los hombres, será negado delante de los ángeles de Dios. Lucas 12:8,9

El testimonio de una persona que ha experimentado el poder transformador de Dios en su vida no puede ser oculto, porque su vida ya no será la misma de antes ciertamente será mucho mejor, por tanto, es nuestro deber compartir lo que sabemos con los que todavía no conocen el amor, la misericordia y el poder de Dios. 

Bendiciones.

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